Tristán e Isolda

Tristán e Isolda están unidos por un amor indestructible, aunque culpable e ilegítimo.
Como será que trascendió en la historia este amor, que el músico alemán Wagner entre los años 1857 y 1859 compuso una Ópera; que fue estrenada en Munich en el año 1865. …Y aquí les cuento la leyenda como la recuerdo. El amor invencibleTristán era el hijo del rey de Leonois y Blancaflor, hermano del rey Marco. Fue educado por Gorvenal, que le enseñaba a manejar la lanza y la espada. A socorrer a los débiles y a detestar la felonía. Se hizo poco a poco maestro en tocar el arpa, y en el arte de la montería. Por otra parte Isolda era hija del Rey de Irlanda.

Cornualles, condado donde reinaba el Rey Marco; tío de Tristán, estaba comprometido por un tratado con Irlanda. En virtud de ese tratado, el condado de Cornualles debía entregar a trescientos jóvenes y a trescientas jóvenes a Irlanda.

El Rey de Irlanda aceptó, sin embargo, que esta obligación no fuera cumplida si un campeón vencía en combate singular al gigante Morholt, su cuñado. Tristán acepta el desafío y vence a Morholt.

Marco decide casarse con Isolda, la de los bucles de oro, y envía a Tristán a buscarla al país de Irlanda. El contrato es concluido rápidamente, y la Reina deja marchar a su hija.

Pero la maga confía al sirviente Brangien, que los acompañe. Prepara un filtro de amor debe dar a beber a los esposos, la noche de bodas. Brangien el sirviente, esconde en el barco la copa que contiene el filtro.

Durante el viaje de vuelta, Tristán e Isolda sienten el deseo de beber. Descubren la copa, y ambos beben su contenido. Isolda bebió a grandes tragos y se lo dió a Tristán, que lo vació. El conjuro fue hecho: un amor indisoluble los unió.

© Morgana Barcelona